“La participación que como derechos humanos hemos realizado tanto la comisión estatal como la coordinación municipal comenzó a principios de abril, y a lo largo de estos cuatro fines de semana de manera permanente dos integrantes de ambos equipos han permanecido atentos durante todo el tiempo que el operativo se encuentra en funcionamiento”, detalló.

Palacios indicó que en estas semanas se ha observado poca resistencia de los conductores con respecto a la aplicación de la medida, e indicó que ha habido amplia disposición coincidiendo incluso en el argumento de que con este tipo de medidas se está previniendo un riesgo.

Además de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos participan en el operativo dependencias como la Secretaría de Salud, la Dirección de Protección Civil, la Coordinación de Servicios Médicos Municipales y la Dirección de Seguridad Pública Municipal a través de sus áreas de fuerzas municipales y policía vial.

“Nuestro compromiso con los potosinos es velar porque no se vulneren sus derechos, sobre todo los de aquellos que conduciendo bajo los influjos del alcohol están en un estado alterado de conciencia y en ocasiones no recuerdan ni dónde dejaron su celular al momento de descender de su auto para que les sea aplicada la prueba”, finalizó.