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Última actualización [14/09/2010]



Trastornos de personalidad en alcohólicos: Un estudio descriptivo


ESPAÑA

En este artículo se lleva a cabo una descripción de los trastornos de personalidad que aparecen con mayor frecuencia en el alcoholismo. Para ello, se cuenta con una muestra de 70 pacientes alcohólicos, que cumplimentan el MCMI-II en el transcurso de la evaluación pretratamiento. Los resultados muestran que el 62,8% de los pacientes presenta, al menos, un trastorno de personalidad. Más en concreto, el trastorno de mayor prevalencia es el pasivo-agresivo (34,1%), seguido del trastorno antisocial (20,4%) y del trastorno por dependencia (20,4%). Asimismo, se compara la prevalencia de los trastornos de personalidad en función del sexo y del abuso añadido de otras sustancias. Los resultados obtenidos en estas variables muestran la existencia de diferencias significativas. Por último, se comentan las implicaciones de este estudio para la práctica clínica y para las investigaciones futuras.

 

Introducción

En los últimos años se ha producido un interés creciente por el estudio de los trastornos duales en el ámbito de las conductas adictivas (Tenorio y Marcos, 2000). No es ajeno a ello la elevada tasa de comorbilidad observada entre la población drogodependiente y su clara influencia en los resultados terapéuticos.

 

No se trata, en modo alguno, de un fenómeno nuevo. Sin embargo, el esfuerzo por mejorar las tasas de éxito de los programas de intervención con pacientes adictos ha generado un claro interés por el estudio de las variables que limitan o mediatizan el alcance de dichos programas.

 

En este sentido, ha cobrado una especial importancia -al menos en lo que a las conductas adictivas se refiere- el análisis de las dimensiones de personalidad más frecuentes en este tipo de población y, más recientemente, de los trastornos concretos de la personalidad que les afectan (Fernández-Montalvo y Echeburúa, 2001).

 

Los trastornos de personalidad se corresponden con pautas de conducta inflexibles y no adaptativas, estables temporalmente y que reflejan alteraciones globales de la persona (Echeburúa y Corral, 1999; Sarason y Sarason, 1996; Vázquez, Ring y Avia, 1990). Estos trastornos pueden estar presentes entre el 20 y 40% de los pacientes psiquiátricos ambulatorios. Hay, por lo tanto, una frecuente comorbilidad entre los trastornos de personalidad y los trastornos mentales (Medina y Moreno, 1998). La presencia de un trastorno de personalidad complica la evolución clínica de un trastorno mental y ensombrece el pronóstico terapéutico (Dowson y Grounds, 1995).

 

La imprecisión conceptual de los trastornos de personalidad dificulta el establecimiento de programas de intervención específicos (Echeburúa y Fernández-Montalvo, 2002). En este sentido, la investigación sobre la presencia de los trastornos de personalidad entre los pacientes alcohólicos es, cuando menos, fundamental.

 

Ello se debe a que permite establecer cuatro aspectos esenciales para la intervención clínica: a) valorar la probabilidad de implicación en el tratamiento y el cumplimiento de las prescripciones terapéuticas; b) modificar las características del tratamiento para adaptarlas de forma individualizada al paciente; c) establecer apropiadamente los objetivos terapéuticos; y d) determinar la necesidad de una mayor o menor rigidez en la estructuración del contexto terapéutico. Sin embargo, los resultados obtenidos en las diferentes investigaciones llevadas a cabo en el ámbito del alcoholismo arrojan unos resultados muy heterogéneos, con una amplia variabilidad en la tasa de comorbilidad encontrada. En concreto, la tasa de alteraciones de personalidad que se ha observado en este tipo de pacientes oscila entre el 30% en algunos estudios (Driessen, Veltrup, Wetterling, John y Dilling, 1998; Pettinati, Pierce, Belden y Meyers, 1999) y el 80% en otros (De Jong, Van den Brink, Harteveld y Van der Wielen, 1993; Nurnberg, Rifkin y Doddi, 1993). El tipo de muestra utilizado -pacientes internos o ambulatorios, centros públicos o privados, etc.- y la diversidad de instrumentos de evaluación empleados, no es ajeno a ello. Por otra parte, tampoco hay un acuerdo con respecto al diagnóstico concreto de personalidad que se asocia con mayor frecuencia al alcoholismo. En algunos estudios destaca el trastorno antisocial de la personalidad (Morgenstern, Lagenbucher, Labouvie y Miller, 1997), mientras que en otros es el histriónico (De Jong et al., 1993), el paranoide (Nurnberg et al., 1993), el narcisista (Pettinati et al., 1999) o, incluso, el no especificado (Driessen et al., 1998).

 

Además, es curiosa, cuando menos, la elevada comorbilidad entre los diferentes trastornos de personalidad en un mismo sujeto, con estudios que indican que hasta un 50% de los alcohólicos estudiados presentan al menos dos trastornos de la personalidad [cfr. De Jong et al., 1993; Nurnberg, 1993). La constatación de este hecho, pone en duda la operatividad de la propia clasificación de los trastornos de personalidad.

 

Por lo tanto, se observa una amplia heterogeneidad de trastornos, que no permite establecer, hoy por hoy, un perfil homogéneo de personalidad en este tipo de pacientes. Por ello, el objetivo de este estudio es conocer la comorbilidad de las alteraciones de personalidad con la adicción al alcohol. Para ello se utiliza el MCMI-II (Millón, 1997), que constituye un instrumento de amplio uso en este ámbito (Donat, Walters y Hume, 1991; Matano, Locke y Schwartz, 1994). Este trabajo forma parte de un estudio más amplio sobre las características psicopatológicas y de personalidad de los alcohólicos, en el que se incluyen entrevistas diagnósticas específicas para los trastornos de personalidad -el IPDE (Loranger, 1995)-, con el objetivo de identificar los trastornos de personalidad que afectan en mayor medida a este tipo de pacientes, así como valorar las variables que se relacionan de forma significativa con los mismos.

 

De esta forma, en una fase posterior, se pretende adaptar los programas terapéuticos a las necesidades específicas de los pacientes alcohólicos.

Se anexa investigación completa en pdf.

 

FUENTE:
  Espacio UNED

http://e-spacio.uned.es/fez/eserv.php?pid=bibliuned:Psicopat-2002-18BBC296-5334-2665-8432-8FF42FB0E9D3&dsID=PDF