El egresado de Ingeniería Industrial y de Sistemas, de la Universidad de Sonora, quien labora en la Coordinación de Accidentes de la Secretaría de Salud, presentó a estudiantes y académicos el Programa Nacional de Alcoholimetría, que se implementa actualmente en doce municipios del estado.

Resaltó que los accidentes de tránsito son la primera causa de muerte en niños y jóvenes en México, por eso en Sonora la Secretaría de Salud se ha involucrado en los operativos de alcoholimetría, porque le apuestan a la prevención para disminuir estas cifras.

“Aparte de las muertes, en Sonora hay al año 15,000 lesionados, 25 millones de pesos en pérdidas más gastos hospitalarios, empobrecimiento de familias y pérdida de productividad en los municipios”, reveló.

Dentro de los temas que expuso en el auditorio Gustavo Figueroa, del Departamento de Ingeniería Industrial, estuvieron los tipos de alcohol, sus características e influencia en el cuerpo humano, su nivel intoxicante, clases de bebidas alcohólicas y sus concentraciones.

También destacó los mitos para engañar al alcoholímetro, además de las señales básicas de una persona alcoholizada, como el aliento, humor, habla, equilibrio, coordinación y reflejos.

Rafael Garibaldi dijo que la Ley Estatal de Tránsito, en su artículo 81, señala que se permite un nivel de .040 gramos de alcohol en 210 litros de aire espirado, y mostró el aparato para detectar estos niveles que utilizan en los operativos.

Informó a los asistentes que el alcoholímetro que se usa en el estado es un Dräguer Safety, uno de los tres mejores a nivel mundial, de marca alemana --certificada por la ONU y la OMS--, y que tiene una programación de 40 días, porque trascurrido este tiempo deben volver a calibrarse, pues se bloquean automáticamente.

Para su presentación, Garibaldi se apoyó con videos, repartió folletería e interactuó con algunos estudiantes, quienes se sometieron a simulaciones que mostraban la falta de coordinación y reflejos de las personas que han consumido alcohol. Él y dos alumnos hicieron la prueba con el alcoholímetro, la cual resultó negativa.