Los productores de mezcal potosinos informaron que los propósitos de esta actividad es certificar el mezcal de esa localidad ante el Consejo Mexicano Regulador de la Calidad del Mezcal y obtener la norma oficial.

La Secretaría de Turismo estatal apoya esta actividad, que se llevará a cabo durante tres días en el patio monumental de Palacio Municipal de San Luis Potosí, ya que al instrumentar un programa de promoción del consumo del mezcal potosino permitirá posicionarlo dentro de mercados estatales, nacionales e internacionales.

Lo anterior, "como un producto potosino de calidad que puede estar a la altura de las bebidas regionales que se les da promoción turística, como el jobito, la bebida tradicional de orgulloso origen huasteco", señaló Enrique Abud Dip, titular de la dependencia.

Destacó el trabajo del Comité Estatal del Producto del Agave Mezcalero en San Luis Potosí, que encabeza Juan Zarur Flores, quien ha establecido un plan de prioridades, como la modernización de destiladoras, homogeneizadoras y envasadoras de mezcal.

Anotó que "las exposiciones, ferias y congresos son aptos para promover los productos potosinos que, por su especialidad y alta calidad, nos dan esa imagen que necesitamos para posicionar la artesanía, gastronomía y atractivos naturales y culturales potosinos".

De propiedades terapéuticas, antioxidantes, limpiador de las arterias, efectivo contra la hipertensión, eliminador de triglicéridos y hasta afrodisíaco, a decir de expertos, el mezcal potosino se exporta a Estados Unidos, Japón, China, España y Francia.

El mezcal potosino se diferencia de otros productos mezcaleros del país por su proceso totalmente orgánico, basado en la fermentación y destilación del agave silvestre que se da en la región del altiplano.

Esta bebida potosina tiene un proceso reposado de elaboración que le da la calidad que poco a poco ha ganado mercado entre los catadores de licores finos, de los pasos del cocimiento, la molienda y fermentación, hasta pasar a los alambiques.

El maguey agavero que se da en el altiplano potosino da trabajo directo a familias y comunidades enteras, y evita la erosión del campo. De esta planta se obtienen otros productos, como el aguamiel, pulque, forraje para caprinos y hasta abono para la misma tierra.

Alrededor de un agave con una antiguedad de 10 años hay cuando menos de 12 a 15 hijuelos, donde se cría una plaga que es un gusano muy apreciado y del cual la gente del altiplano sabe que en el mercado gourmet se llegan a pagar hasta 200 pesos por kilogramo.

La materia prima del mezcal se obtiene de la piña del maguey, que se corta hasta los 18 meses por los "rejaderos", la versión de los "jimadores" tequileros. Si se desea un mezcal reposado, se guarda en barricas de tres meses a un año; si se quiere uno añejo, se le deja de un año en adelante como mínimo.