La regidora laboró durante más de seis años como elemento de Tránsito, por lo que asegura que ofrecerá un plan de trabajo que vaya encaminado a erradicar algunos vicios que pudieran estar arraigados en la dependencia.

Y por eso andará cazando a los agentes que gusten de llegar a trabajar fuera de sus cinco sentidos.

“Me refiero a enfiestados con que es fin de semana, acudieron a una fiesta, llegan desvelados, llegan tarde y traen aliento a alcohol y así trabajan, son parte de las quejas que me han estado diciendo algunos oficiales”, aseveró.

Buscará que no se solape ninguna irregularidad en este sentido y de encontrar algún caso pedirá que se aplique la sanción correspondiente.

Dialogará con la alcaldesa Peraza Guerra para darle esta propuesta, para corroborar que cada uno de los tránsitos acuden a trabajar en las condiciones óptimas.

Promete que habrá de traer bajo la lupa a cada uno de los 77 elementos para verificar que no caigan en las tentaciones de las llamadas mordidas o actos de

extorsión, constatando que brinden un servicio de calidad a los automovilistas que violan el reglamento en esta materia.

Dará seguimiento a cada uno de los casos que se denuncien ante la contraloría municipal del Ayuntamiento.