“En Presidencia no lo autorizaban y como pasó tanto tiempo, pensamos que ya no se realizaría... pero de pronto lo autorizaron y a trabajar”, dijo el empresario, quien título el proyecto como Vinos México 2010.

Pero eso no fue todo, la gente cerca a Calderón también cambió cosas en el diseño de la botella.

“No nos dejaron poner la bandera de México, pero bueno... todo salió bien al final”, explicó Millot. “Aunque no lo volvería hacer”.

Por su parte, Jorge Trejo de Casa Madero fue franco y opinó: “Es triste que este proyecto lo realice un extranjero... pero sino hubiera sido él, nunca se hubiera realizado pues los mexicanos nunca nos ponemos de acuerdo. Por eso, en Casa Madero estamos muy contentos de ser parte de todo esto”.

Así, en mayo se continuó con los trabajos de producir dos tintos y un vino blanco.

Un vino conmemorativo

“Se lanzó la convocatoria y 21 bodegas decidieron participar con sus mejores caldos. Así, con el trabajo de mucha gente y de enólogos y sommeliers (como Pedro Poncelis y Manuel Orgaz) se logró un gran vino que representará a México”, agregó Laurent Millot, el director de Ampely, empresa que se dedica a la exportación e importación de vinos.

El dibujo de la botella es un collage del Ángel de la Independencia, Miguel Hidalgo, Pancho Villa y un nopal hecho por el artista Patrick Silve.

Algunas de las bodegas participantes son Adobe Guadalupe, Bibayoff Vinos, Bodega La Roganto, Bodegas Ferriño, Bodegas San Rafael, Bodegas Santo Tomás, Casa Madero, Casa Pedro Domecq, CavasFreixenet de México y Monte Xanic.

Finalmente, Laurent Millot comentó que probablemente sólo 30% de los Vinos Bicentenarios se descorchen.

“Creo que es un vino de colección y para guardar. Pero claro que en un momento especial la gente lo abrirá”.