Dada la problemática que vive la economía del país, Grupo Modelo afirmó que no es el momento para que el gobierno federal piense en incrementar impuestos, y en especial en gravar aún más la venta de cerveza, ya que las consecuencias podrían derivar en una disminución importante en las inversiones de las compañías cerveceras y en una reducción en su planilla laboral.

El presidente y director general de Grupo Modelo, Carlos Fernández, indicó que es necesario que el Ejecutivo y el Legislativo analicen que es mejor mantener el nivel de impuestos actuales, ya que con ello se podrán lograr los ingresos fiscales -en materia de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios- que el país necesita para el siguiente año, a través de las ventas que logre la industria cervecera.

"La propuesta es que nos dejen como estamos, nosotros a través de las actividades de comercialización y posicionamiento de producto, nos encargaremos de que se reciban los impuestos requeridos", indicó.

En entrevista, después de su participación en el foro de The Economist, el empresario insistió en que un alza en los impuestos provocaría que el precio de los productos se incremente y el volumen de ventas baje, teniendo como consecuencia que la producción de cerveza disminuya y al mismo ritmo caigan las inversiones.

Manifestó que el tipo de inversiones que se dejarían de efectuar son a largo plazo, no de un año a otro, de tal suerte que reiteró el interés del grupo de construir una nueva fábrica en territorio nacional. Dijo que la planta llevará tres años en edificarse, por lo que no podrían dejar parado el proyecto por un aumento en la carga fiscal.

Fallo arbitral

Por otro lado, Fernández aseguró que será a finales de este año cuando el panel arbitral otorgue su fallo final respecto a la controversia entre los accionistas de Grupo Modelo y Anheuser Busch-Inbev (ABI).

Aunque no quiso opinar más sobre el tema, sí comentó sobre la intención de Fomento Económico Mexicano (FEMSA) de vender su división de cerveza a las empresas SABMiller o Heineken.

El ejecutivo aseguró que de efectuarse la transacción, hará al mercado mexicano mucho más competitivo, y recordó que hasta hace cien años existían cerca de 30 grupos empresariales cerveceros diferentes, aunque hoy con la consolidación del sector sólo quedan diez.

Sobre los resultados para el cierre del año, dijo que tras registrar un primer semestre positivo, esperarían que con la innovación de productos y el incremento en la participación de mercado en otras regiones, la empresa estaría en condiciones de crecer a un porcentaje por encima del Producto Interno Bruto (PIB) del país.

Respecto al formato de tiendas Extra, comentó que gracias a la estructura realizada a la división han reportado buenos números, aunque reconoció que no crecerán en número de unidades de una manera tan dinámica como antes, por lo que "terminaremos el año con crecimiento moderado".