El restaurante 10 de Parques de Polanco, fue el lugar donde se dieron cita los comensales que maridaron distintas etiquetas del vino Trapiche con platillos como Ravioles de espinaca y ricota con salsa rosa al que se le acompañó con Broquel Bonarda; un provoleta fue maridado con Malbec de roble, y finalmente, fue servido un vacío argentino acompañado con verduras a la parrilla en compañía de Iscay, una fusión de Merlot y Malbec al 50 por ciento. , El enólogo Casé recordó su infancia entre los viñedos de Mendoza, donde inició su gusto por la crianza de la uva, el juego entre las tierras, el sol, la altura de las siembras, el clima, la elección de las plantas, el corte, y cada evento que se conjugan para dar como resultado un vino.

Casé mencionó que sus inicios en la enología se dio a sus escasos 13 años, inducido por su padre que se dedicaba productor vinos espumosos y ahora hace lo mismo con sus hijos, pasar la tradición de criar vinos por el placer de disfrutar de estos. Junto a su esposa Carolina, mantiene la práctica de incorporar desde la infancia a sus hijos al mundo de la vitivinicultura. A la empresa argentina, Casé llegó desde hace 9 años, y hasta la fecha se encarga de la producción de vinos, entre los que destacan los tintos como el Cabertnet Sauvignon, Pinot Noir Barrica, Bonarda Broquel, Syrah Barrica, y Malbec Barrica, y de los vinos blancos los que ganan terreno son el Sauvignon Blanc y Torrontes.