LA PRIMERA INGRESOS 2010

El 20 de octubre, a más tardar, se aprobará la Ley de Ingresos 2010 en la Cámara de Diputados. ¿Qué se cocinará El pronóstico perfila que no habrá cambios de fondo. El Senado afina la maquinaria para ultimar los detalles del paquete. Página 6

Sin sorpresas LEY DE INGRESOS 2010

El esquema para la captación de recursos está en el horno, sin embargo los jalóneos políticos perfilan un paquete sin sustancia pues no se prevé el quiebre de los regímenes fiscales preferenciales y el aval para ampliar la deuda. El PRI, que lleva la batuta, se aferra al cálculo electorero.

La cuenta regresiva para la aprobación de la Ley de Ingresos 2010, que ya está en marcha, no augura sobresaltos. Así, el pronóstico que toma cuerpo gracias a las señales expuestas desde la Cámara de Diputados, va en esta dirección: el PRI, que tendrá la última palabra para definir los alcances de la captación de ingresos públicos, no está dispuesto a cogobernar con Felipe Calderón y, en cambio, está decidido a delegar todos los costos políticos de esta decisión a la Presidencia de la República y, en todo caso, está valorando la posibilidad de realizar una serie de ajustes, quizás cosméticos, en torno de ciertas políticas de excepción.

Hoy, cuando la fecha fatal para cocinar la Ley de Ingresos 2010 está cerca (20 de octubre), la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados ya está en sesión permanente y se sabe que los puntos neurálgicos de esta negociación son el impuesto de 2% al consumo generalizado, las bases especiales de tributación y sobre todo el régimen de consolidación fiscal, cuyos pretendidos cambios han generado un intenso cabildeo de la comunidad empresarial.

En el trabajo fino, la fracción parlamentaria del PRI, aparentemente, tiene una consigna: no generar aspavientos, mantenerse alerta a las nuevas propuestas que aparezcan y seguir la línea de su cúpula, tripulada por los gobernadores y su líder cameral Francisco Rojas. Una cosa tienen clara: cualquier costo político que se tenga que pagar, será exclusivamente cargado a la cuenta de Felipe Calderón.

En los hechos, los priístas presumen su compromiso de ir en contra de la evasión fiscal y el contrabando; además, insisten en discutir la viabilidad de contratar más deuda y aumentar el déficit fiscal.

El lobbying no ha sido terso. La semana pasada, en la sede del PRI, durante una reunión privada, Enrique Peña Nieto y Fidel Herrera, gobernadores del Estado de Méxicoy Veracruz, respectivamente, no avalaron abiertamente la aprobación del impuesto de 2%, pero admitieron que "debe pensarse" pues hay una oferta de 45,000 a 50,000 mdp para estados y municipios que se canalizaría a las arcas locales vía participaciones federales y que provendrían de ese impuesto, cuya discusión todavía está en el aire.

Bajo estas inercias, el partido que domina las negociaciones en la Cámara de Diputados tiene, metafóricamente, el alma revuelta, ya que sabe que la decisión que tome será determinante para marcar la suerte del país en 2010 y, por tanto, reconoce que el calibre de ésta también generará réditos políticos que pudieran reconfigurar el juego por el poder rumbo a2012. Por eso, ha deslizado su intención de revisar algunos asuntos filosos, como los regímenes especiales de tributación, que según la SHCP podrían andar en el orden de los 500,000 mdp en 2010; pero también sabe que hay otros tópicos -como el IVA de 2%que difícilmente negociará porque así se lo prohiben sus estatutos.

Así, públicamente, los diputados clave del tricolor ya enseñan sus cartas. Luis Videgaray, presidente de la Comisión de Presupuesto, adelanta que el PRI no avalará el IVA en alimentos y medicinas. Por su parte, Sebastián Lerdo de Tejada, quien preside la comisión especial para analizar el PEF 2010, informa que se revisarán con detalle los tratamientos fiscales especiales.

Pero, finalmente, en San Lázaro no se ve voluntad para trascender. De acuerdo con los mismos testimonios del PRI, las perversiones fiscales son temas ineludibles, pero confiesan que no cuentan con un mecanismo para tumbarlos y, al mismo tiempo, justifican que no hay tiempo para ir al fondo de estos asuntos, por lo que informan que su discusión no concluirá en estos días y será un tema pendiente que gravitará en las discusiones de la LXI Legislatura. En pocas palabras, no habrá novedades que presumir, por lo menos, en el futuro inmediato.

Por Gerardo Flores

LOS PUNTOS FINOS DEL PAQUETE

El documento que diseñó la SHCP para captar ingresos en 2010 y tapar un boquete fiscal por 350,000 mdp ha desbordado las pasiones y ha sido atrapado por las descalificaciones de buena parte de los actores políticos. Por eso, los momios apuntan a que la propuesta oficial será modificada por el Congreso.

Así, la propuesta ofrece algunos puntos delicados, entre los que destacan:

1) Incrementar la tasa de IEPS para la cerveza de 25 a 28% durante el periodo 20102012, y reducirla posteriormente a 27 en 2013 y 25 en 2014; además, para los tabacos, aplicaría una cuota por gramo de tabaco o por cigarro de 80 centavos por cajetilla a partir de 2010.

2) Plantea el alza de 20 a 30% para los juegos y sorteos, mientras que en telecomunicaciones propone establecer un impuesto de 4% a los servicios que se prestan a través de una red pública (quedarían exentos la telefonía pública y rural, así como el servicio de interconexión).

3) Aplicar un impuesto de 2% a las ventas de todos los bienes y servicios.

4) En lo referente a la consolidación fiscal, propone hacer exigibles los saldos actualizados con antigüedad mayor a cinco años del ISR diferido por los grupos sujetos a la consolidación fiscal (grandes empresas), mediante un esquema de pagos consistente en que en cada ejercicio se entere 60% de los saldos de los impuestos diferidos correspondientes a dicho ejercicio, y por el restante 40% se hagan pagos de 10% durante cuatro ejercicios.

5) Propone que los contribuyentes puedan emplear su estado de cuenta y facturas digitales como comprobantes fiscales y también congelar cuentas bancarias de los contribuyentes para recuperar adeudos.

Cuartoscuro / Isaac Esquivel La propuesta de la SHCP